15 AÑOS DE FRIKISMO
25 de mayo de 2021
Es difícil empezar un discurso así. Aunque lo prefiero al discurso online en el que entro en directo con cara de bobo mirando al infinito. Es difícil empezar este discurso. Porque solo va a ser una vez. Porque me voy a emocionar. Porque hay muchos discursos en la cultura friki mejores que el que voy a hacer.
Podría decir “Desde este banco quince años nos contemplan”, pero Napoleón no es bienvenido en Cádiz. Mejor quedaría algo como “No conozco a la mitad de ustedes, ni la mitad de lo que querría, y lo que yo querría es menos de la mitad de lo que la mitad de ustedes se merece”, pero ni soy tan, tan viejo ni tengo un anillo tan poderoso.
Podría decir “Desde este banco quince años nos contemplan”, pero Napoleón no es bienvenido en Cádiz. Mejor quedaría algo como “No conozco a la mitad de ustedes, ni la mitad de lo que querría, y lo que yo querría es menos de la mitad de lo que la mitad de ustedes se merece”, pero ni soy tan, tan viejo ni tengo un anillo tan poderoso.
Además, siempre hago discursos repletos de referencias, pero hoy, aunque no pueda hablar más alto porque mi voz no sea potente, me gustaría hablar lo más claro posible.
Es un orgullo, orgullo friki, haber empezado aquí, en esta plaza del Palillero, muy cerquita de la Casa de la juventud, nuestra casa, y también punto equidistante de las tiendas frikis amigas. Las que existen, como Tierra Media y El Dorado, o las que existieron, como Leviatán. También muy cerca del café Mónaco donde comenzamos a idear los eventos y donde nació formalmente la asociación.
También, esta plaza del Palillero donde se instauró el primer cine. Lugar de quedar y darle al palique. Lugar de concentraciones, lugar de manifestaciones, del 15M, de carnavales. Esta plaza donde nuestro escenario rivalizó con un paso cofrade. Esta plaza donde hemos celebrado varias ediciones en el centro integral de la mujer. Esta plaza que es el lugar de otro banco dedicado al orgullo LGBT, por lo que representa dos luchas y reivindicaciones mucho más importantes.
Pero tras el género y la identidad sexual, bastante más atrás, de forma tímida y pidiendo permiso, aquí también celebramos el orgullo friki. Que como otros orgullos no consiste en orgullo alguno, sino en alzar la voz y decir que podemos ser frikis y gustarnos los que nos dé la gana. Que todos somos frikis y no hace falta disimular.
Nosotros nos reunimos aquí por primera vez hace 15 años. Empezamos a confabular en foros y chats del pretérito internet, colgamos carteles y nos vimos un 25 de mayo de 2006, primer Día del Orgullo Friki. Éramos unos chavales muy jóvenes que vimos como nuestra simple idea de concentrar a los frikis salió demasiado bien. Vino la prensa, vino Iván vestido de Jedi, vinieron muchos otros jóvenes que improvisaron partidas de rol o de Magic.
Mis compañeros, entre ellos Aroa, Ricardo, Marru y Chano, aún menores de edad, y yo, que casi acababa de cumplir la necesaria para votar, nos subimos en este mismo banco y pese a nuestra juventud, nuestra timidez y nuestras dudas leímos el manifiesto que habíamos escrito. Yo recuerdo mi temblorosa voz, la misma que tengo ahora, coreada por los ánimos de todos los que allí estaban. A nadie le importó quién o cómo éramos, nos vitoreaban y celebraban lo que salía de nuestras bocas. O quizás sí que importaba quién y cómo éramos porque al fin y al cabo éramos unos frikis lanzando una proclama, usando un banco como no se usan los bancos, pero paradójicamente exprimiendo su carácter público y popular.
Y en estos quince años ha pasado de todo. Nació Milenaria. Seguimos organizando días frikis. Llevamo más de 70 eventos organizados o colaborando a nuestras espaldas, jornadas, visitas a colegios y actividades puntuales aparte. Hemos reunido 20.000 personas en el Festival Manga. Habrán pasado cientos de socios, incontables. Nacieron más asociaciones frikis, muchas de las cuales podemos decir que son amigas.
Al final es nuestro modo de vida. El frikismo, pero también los eventos y Milenaria. Nuestra excusa para pasarlo bien. Nuestra excusa para hacer cosas sin excusas banales como el dinero. Nuestra forma de relacionarnos, de hacer amigos, de conocer gente, de aplicar nuestros conocimientos, de forjar colaboraciones, de conocer más aficiones y mundos, de intercambiar entre gente muy distinta.
Los frikis somos muy peligrosos. Un día nos da por reunirnos en un banco y quince años después la gente sólo habla de Marvel, Star Wars, Harry Potter o Juego de Tronos. Un día nos da por reunirnos y quince años más tarde nos colocan una placa para recordarlo con el beneplácito del ayuntamiento. Los frikis somos peligrosos porque pensamos distinto y eso puede conllevar increíbles consecuencias. Pero no os preocupéis, porque sabemos también que un gran poder conlleva una gran responsabilidad, y que nos caímos en la marmita del frikismo cuando éramos pequeños y no deberíamos beber más de ella. Y ya veréis qué habremos hecho con nuestro superpoder dentro de otros quince años.
Los frikis somos muy peligrosos. Un día nos da por reunirnos en un banco y quince años después la gente sólo habla de Marvel, Star Wars, Harry Potter o Juego de Tronos. Un día nos da por reunirnos y quince años más tarde nos colocan una placa para recordarlo con el beneplácito del ayuntamiento. Los frikis somos peligrosos porque pensamos distinto y eso puede conllevar increíbles consecuencias. Pero no os preocupéis, porque sabemos también que un gran poder conlleva una gran responsabilidad, y que nos caímos en la marmita del frikismo cuando éramos pequeños y no deberíamos beber más de ella. Y ya veréis qué habremos hecho con nuestro superpoder dentro de otros quince años.
Pero necesito ya mostrar las cartas de esta pantomima. Esto es una excusa. Una excusa para celebrar algo más importante que los quince años de Día Friki. Lo que estamos celebrando, señores y señoras, humanos y elfos, extraterrestres y terrícolas, lo que estamos celebrando es un día de hace quince años donde gente que apenas se conocía se hicieron amigos. Y esos, a su vez, se hicieron amigos de otros frikis. Y la mitad de los que se involucraron en la asociación se hicieron amigos, y la otra mitad son amigos a los que involucramos en la asociación. Y quince años más tarde no hay nadie aquí que pueda decir que Milenaria o el frikismo no sea culpable de sus amistades.
Así que os digo:
¡Viva el Día Friki! ¡Viva el frikismo! ¡Viva la amistad! ¡Milenaria Prevalece!
Miguel Gutiérrez Villarrubia, actual presidente de la asociación,
antes de desvelar la plaza conmemorativa el 25 de mayo de 2021.